Se descubrió el pastel.
Han tenido que pasar un par de meses para que pudiera volver a escribir algo significativo sobre el acuario. La última entrada en la que hablaba de la pareja de L.ocellatus ¿Seran pareja? parece que por fin ha derivado en algo.
En lineas generales el acuario sigue igual, aunque los peces están algo más adultos y grandes, se respira armonía y hay pocas peleas, aunque han vuelto los problemas de algas.
Durante estos dos meses en mi afán por conseguir mejores condiciones para mis peces estuve leyendo, entre otros, el artículo La química del agua del lago Tanganyika un artículo muy interesante escrito por Jorge Bravo, en el que se hace un pequeña disertación sobre cuales son las sales del Lago y cómo podemos hacer semejantes los parámetros del acuario a los del Lago.
Ciertamente, me puse a pensar en lo importante que es para los peces la regulación osmótica y aunque el cíclido africano es un pez duro y seguramente podría aguantar en agua destilada (mejor no probarlo), recordé que en mi anterior experiencia con los L.ocellatus de vez en cuando había hechado Bicarbonato sódico a ojo en el acuario (principalmente por el carbonato para los caracoles Pomacea con los que vivían), esta vez leyendo el artículo extraje que básicamente hay dos sales importantes en el Lago y que hay otras dos más solubles que podemos usar, Bicarbonato sódico y Sulfato magnésico heptahidratado.
Dispuesto a acercar un poco más esos valores, me hice con Bicarbonato sódico y con un poco de Sulfato de Magnesio y Sulfato de Potasio que ya tenía, hice lo propio.
La cantidad de Bicarbonato Sódico (la más importante) la calculé mediante la calculadora del artículo y agregué una cantidad un poco por debajo de lo que me indicaba (40 gr. por precaución), de los otros dos componentes agregué a ojímetro pero muy poco, estos habían sido usados como abonos en amazónico o sea que en el peor de los casos crecerían algas (aún más) y la S.subulata, en el mejor de los casos, la disociación llevaría a nuevas asociaciones de K y Mg, con Cl, SO o CO, desconozco si cabe la posibilidad, pero tampoco voy a pegarle un repaso a los apuntes de química para averiguarlo, no tiene mayor importancia.
El caso, es que al poco tiempo, y no creo que por casualidad los L.ocellatus se han reproducido, y han concluido lo que hace meses no acababan de cerrar. Por fín han realizado una puesta y han nacido alevines.
La cuestión que me ronda por la cabeza es ¿Será el Bicarbonato sódico el detonante clave para que realicen una puesta con éxito?
¿Por que no ha incitado a la pareja de Similis, que llevan tiempo en la misma situación?
Bueno, ahí dejo unas fotos.
Han tenido que pasar un par de meses para que pudiera volver a escribir algo significativo sobre el acuario. La última entrada en la que hablaba de la pareja de L.ocellatus ¿Seran pareja? parece que por fin ha derivado en algo.
En lineas generales el acuario sigue igual, aunque los peces están algo más adultos y grandes, se respira armonía y hay pocas peleas, aunque han vuelto los problemas de algas.
Durante estos dos meses en mi afán por conseguir mejores condiciones para mis peces estuve leyendo, entre otros, el artículo La química del agua del lago Tanganyika un artículo muy interesante escrito por Jorge Bravo, en el que se hace un pequeña disertación sobre cuales son las sales del Lago y cómo podemos hacer semejantes los parámetros del acuario a los del Lago.
Ciertamente, me puse a pensar en lo importante que es para los peces la regulación osmótica y aunque el cíclido africano es un pez duro y seguramente podría aguantar en agua destilada (mejor no probarlo), recordé que en mi anterior experiencia con los L.ocellatus de vez en cuando había hechado Bicarbonato sódico a ojo en el acuario (principalmente por el carbonato para los caracoles Pomacea con los que vivían), esta vez leyendo el artículo extraje que básicamente hay dos sales importantes en el Lago y que hay otras dos más solubles que podemos usar, Bicarbonato sódico y Sulfato magnésico heptahidratado.
Dispuesto a acercar un poco más esos valores, me hice con Bicarbonato sódico y con un poco de Sulfato de Magnesio y Sulfato de Potasio que ya tenía, hice lo propio.
La cantidad de Bicarbonato Sódico (la más importante) la calculé mediante la calculadora del artículo y agregué una cantidad un poco por debajo de lo que me indicaba (40 gr. por precaución), de los otros dos componentes agregué a ojímetro pero muy poco, estos habían sido usados como abonos en amazónico o sea que en el peor de los casos crecerían algas (aún más) y la S.subulata, en el mejor de los casos, la disociación llevaría a nuevas asociaciones de K y Mg, con Cl, SO o CO, desconozco si cabe la posibilidad, pero tampoco voy a pegarle un repaso a los apuntes de química para averiguarlo, no tiene mayor importancia.
El caso, es que al poco tiempo, y no creo que por casualidad los L.ocellatus se han reproducido, y han concluido lo que hace meses no acababan de cerrar. Por fín han realizado una puesta y han nacido alevines.
La cuestión que me ronda por la cabeza es ¿Será el Bicarbonato sódico el detonante clave para que realicen una puesta con éxito?
¿Por que no ha incitado a la pareja de Similis, que llevan tiempo en la misma situación?
Bueno, ahí dejo unas fotos.
Espero que os gusten.
Un saludo.
Un saludo.
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